En las etiquetas donde se refleja la composición analítica de los piensos para caballos encontramos un constituyente llamativo: las cenizas brutas. Evidentemente, ningún pienso de calidad lleva lo que todos entendemos popularmente por ‘cenizas’.

Las ‘cenizas brutas’ no son más que una denominación técnica de los componentes inorgánicos o minerales de los alimentos del pienso en cuestión.

¿Que por qué se llaman así? Por la técnica de análisis empleada. El contenido en componentes inorgánicos o minerales del pienso se determina por ignición a 500ºC de una cantidad conocida del mismo, hasta que todo el carbono ha sido eliminado (quemado). El residuo, o cenizas, que no se puede combustionar se considera representativo de los componentes inorgánicos de los alimentos. (Para obtener las proteínas o la grasa se emplean otras técnicas).

Se trata del sistema de análisis conocido como análisis inmediato de los alimentos, establecido hace más de 100 años por dos científicos alemanes, Hennenberg y Stohmann. Y aunque en los últimos tiempos se han presentado nuevas técnicas analíticas que mejoran la información acerca de los alimentos, este sistema sigue siendo la base de la declaración reglamentaria de la composición de aquellos en  Europa y, lógicamente, es la que debemos cumplir a rajatabla los fabricantes de piensos.

Veamos cualquier pienso Covaza. Por ejemplo haced clic sobre este enlace: Ficha nutricional MARES AND FOALS. Vemos que aparece un 9% de cenizas brutas. No es ni más ni menos que el resultado de la suma de ‘cenizas brutas’ o, dicho de otro modo, de todos los componentes inorgánicos o minerales de los ingredientes empleados en la composición del pienso incluyendo los que añadimos en Covaza para lograr los niveles nutricionales óptimos para los caballos.

Abrir chat
1
Escanea el código
Hola
¿En qué podemos ayudarle?