Si existe alguna actividad verdaderamente extenuante en la vida de las yeguas, es la cría. Una yegua en el último mes de gestación y, sobre todo, en los primeros 4 meses de lactancia realiza el mayor esfuerzo de su vida, y ello conlleva la necesidad de suministrarle alimentos de mucha calidad, altos en nutrientes esenciales, en esa etapa de su vida.
Piensos como Covaza Mares & Foals aportan un alto nivel de proteína, en cantidad y en calidad, y de energía segura (evitando aquellas fuentes energéticas que nos puedan desencadenar enfermedades como laminitis, cólicos o intolerancia a la insulina).
Antes del parto la condición corporal de la yegua debe ser más que satisfactoria, pero sin excesos, puesto que una yegua obesa también puede acarrear problemas en la cría de su potro.
Sin embargo debemos proveerla de suficientes reservar corporales para afrontar la crianza en las mejores condiciones. Y en esas reservas debemos contemplar, nutrientes, vitaminas, macrominerales y microminerales o elementos traza, todos en las cantidades adecuadas y, muy importante, equilibradas entre sí.